En la fotografía profesional de ropa, las imágenes con modelos dan personalidad y forma a la prenda, algo que un maniquí no puede hacer. Ayudándote de un modelo, puedes incitar a los clientes a querer adquirir el producto, pues ven como luce en una persona. Además esto simplifica el tiempo dedicado a preparar el producto; al no tener que entrar demasiado en temas de estilismo para la sesión fotográfica.

Sigue este simple proceso para crear atractivas y efectivas imágenes de ropa con modelos.

En todo caso, las fotografías de ropa con modelos reales dan, sin duda, una sensación de profesionalidad en comparación con las de otros productos bien presentadas. Sigue los siete pasos a continuación para maximizar la apariencia profesional y atractivo de tus fotografías de producto, y desarrollar de esta manera un catálogo consistente de imágenes para tu negocio en Internet o tienda online:

Paso 1: Elige un Modelo

Existen tres factores básicos a tomar en cuenta al seleccionar un modelo: (1) sentirse cómodo para trabajar con el o ella, (2) la disponibilidad que tenga, siempre será mejor que puedas trabajar con el mismo modelo por un tiempo más largo, (3) y como luce la ropa en el modelo.

Es muy importante elegir uno o algunos modelos con los que haya comodidad para trabajar. Mientras más reduzcas el tiempo de adaptación para comunicarse con éste, mejor fluirá la sesión fotográfica, y mejores serán los resultados. Igualmente, para crear un “look” consistente y profesional de tus productos, siempre será mejor que se utilice al mismo modelo en todas las fotografías de producto de tu negocio. Facilitará las cosas; una vez que hayan trabajado juntos, el modelo entenderá claramente tu visión y lo que necesitas mostrar en las fotografías de cada uno de tus productos.

También necesitarás tomar en cuenta cuidadosamente como lucen tus productos en el modelo que hayas seleccionado – si la prenda no luce realmente atractiva en el modelo, quizás tendrías que buscar otra persona. Esto puede suceder por el tipo de cuerpo del modelo; existen prendas que no lucen bien en ciertos tipos de cuerpos. Recuerda, a pesar de que tengas muchas tallas disponibles en tu línea de producto, debes de elegir una sola y fotografiarla en toda las sesiones que se realicen para que haya más consistencia y luzcan mejor tus imágenes de productos.

Paso 2: Prepara el Espacio

El espacio que debes preparar para la sesión fotográfica debe ser cómodo. El modelo debe poder moverse con comodidad. En todo caso, también es importante que el espacio no sea demasiado grande y que haya un límite del fondo, que ayude a ubicar al modelo, y que entonces éste pueda saber cual es su espacio y donde debe de ver a la cámara.

Asegúrate de tener el equipamiento adecuado y espacio necesario para obtener imágenes de calidad. En esta imagen, verás algunos ejemplos de componentes necesarios para realizar la sesión: fondo blanco de un papel o tela, un trípode para la cámara, flashes, refractantes de luz y una sombrilla (más información en el paso 3).

El utilizar un fondo blanco no es algo necesario, pero es importante tener en cuenta que el blanco ayudar a dar protagonismo a la prenda y al modelo que la tiene puesta. Además de resaltar colores que otros fondos como el negro, no pueden lograr, y que pueden comprometer la eficiencia en la post-producción.

Igualmente, un trípode no es siempre necesario si tienes suficiente luz natural disponible, pero es verdad que utilizar uno contribuye a tener mejores resultados en la calidad de la imagen. Sea cual sea el color del fondo a utilizar, o de la estabilización de imagen que uses, siempre sé consistente y ten en cuenta estas recomendaciones para todas tus imágenes de producto.

Paso 3: Crea la Luz Correcta

Como se mencionó previamente, alquilar o comprar el equipo de iluminación correcto es un requerimiento crítico a la hora de crear imágenes de producto de calidad. El conjunto de equipos más común consiste de 1-3 refractantes de luz (con soporte) o 1-3 flashes, y sombrillas con soporte.

Cuando evalúes el equipo de iluminación que utilizarás, recuerda que tu objetivo es buscar una manera de suavizar la luz natural, algo que ya hacen los refractantes de luz automáticamente, pero que aún incluyendo sombrillas, cuando hay flashes, estos pueden ser demasiado directos y fuertes, y no se crearán imágenes de calidad.

Si ese es el caso, simplemente acomoda los ángulos de los flashes hacia los lados del modelo para que la luz de estos se refleje en las paredes, y no directamente (como se muestra en la imagen).

No tengas miedo de experimentar – pero sólo hazlo antes de la sesión para aumentar la eficiencia cuando ya esté el modelo presente.

Paso 4: La Posición del Modelo

Una vez que tienes ya preparado el fondo y la iluminación, y ha llegado el modelo para la sesión, será momento de informarle de la posición que deberá adoptar en el espacio que has preparado para lograr tu objetivo. La manera más fácil de asegurar que el modelo está en la posición adecuada, es marcando una X en el suelo. De esta manera se establecerá más fácilmente la posición deseada, pues el modelo podrá saber donde debe de ubicarse o alinearse. Este paso aplicado correctamente contribuirá a posicionar al modelo exactamente en la ubicación correcta, a que lo haga en el marco específico para la imagen y a evitar sobre todo perder tiempo durante la sesión fotográfica.

Paso 5: Enmarcado Panorámico

Debido a que existe una amplia variedad de recorte y ajustes de tamaño de imágenes en diferentes estándares de la web, es una buena idea hacer las fotografías utilizando un enmarcado panorámico. Esto significa que tendrás que dejar espacio adicional alrededor del modelo en la imagen para luego recortarla sin problemas.

Es mejor tener una imagen con mucho espacio adicional que pueda recortarse sin inconvenientes. Acuérdate de incluir también los brazos y piernas del modelo en la imagen.

Mientras algunas imágenes y marcas incluyen las caras y expresiones de sus modelos en sus fotografías de producto, algunas otras no lo hacen para disminuir la distracción del usuario de la prenda desplegada en la imagen.

Recortar las caras de los modelos es una buena opción si apenas estás empezando, o si quieres ahorrar algo de dinero y tiempo.

Este es un ejemplo de una imagen de producto antes de que sea recortada. Se pueden apreciar el espacio adicional alrededor del modelo. Hay dos líneas azules sobre la nariz y la rodilla, que serán los sitios donde se realizará el corte y retocado.

Paso 6: Dirige y Orienta al Modelo

Imagen: Estas poses estándares son simples pero efectivas.

Durante la sesión fotográfica, el modelo seguirá tus instrucciones. Recuerda que las imágenes se crearán para satisfacer tu visión del tema. Sé muy claro y preciso en tus indicaciones. Utiliza órdenes específicas, por ejemplo: si quieres que el modelo mire en una posición determinada, dile que mire directamente a un objeto que hayas colocado en una ubicación exacta. En muchas ocasiones recuerda que mientras más simple sea la pose, mejor resultados tendrá la imagen. Las poses sofisticadas distraerán la atención del cliente de la prenda que se quiere vender.

Además es una buena idea utilizar enmarcados distintos, en muchos ángulos y poses posibles. Esto te aportará más opciones para elegir durante el proceso de post producción, y ayudará a seleccionar las mejores imágenes para vender tu producto.

Paso 7: Post-producción

Asegúrate de dejar tiempo para la post-producción en tu flujo de trabajo. Deberás tener tiempo para poder editar tus imágenes por ti mismo, pero recuerda también que externalizando esta tarea podrás tener más tiempo para dedicar a otros aspectos importantes del negocio. En caso que elijas contratar a alguien para editar tus imágenes, asegúrate que sea un profesional que pueda ayudar a hacerlas ver de una manera consistente. Debes de informar en ese caso, tus guías de imágenes respecto a reportes, tamaño, etc.

Tanto si editas por tu cuentas las imágenes o externalizas el tema, a continuación encontrarás ajustes claves que pueden serte útiles para los ajustes que deberán hacerse:

  • Ajustes de iluminación
  • Retoques de piel
  • Retirar arrugas
  • Eliminación de imperfecciones en el producto
  • Recortes y ajuste de tamaño

Recuerda que el propósito principal de utilizar un modelo es facilitar dar forma a la prenda que quieras promocionar, y que los clientes puedan tener una idea de como se ve sobre un cuerpo.

Estos siete pasos te abrirán camino para poder crear imágenes profesionales, y consistentes que darán una impresión muy positiva a tus potenciales clientes.